SOLO A TI
Dejaré que salga libre, dulce y confiado,
como voz que encuentra su sonido,
como torrente que halla su río,
como nunca pude decir,
todo lo que eres para mí.
Eres remanso quieto y callado
donde van a reposar y hablarte mis sueños
y escucha mi alma su suave murmullo.
Rocío cristalino, puro y transparente,
que consuela el hondo pozo de mi melancolía
y lo cubre mansamente.
Eres vida y amor en esencia,
temblor que vibra en celaje etéreo,
que por sentir y amar se da, día a día,
y a seguirla, con apremiante y tierna llamada,
convida a mi amor ya tan olvidado,
de donde se oculta mudo y callado.
Para responderle anhelante te diré,
que eres de mi vida la verdad
por siempre buscada y añorada,
y en cuanto a mi amor... dime:
¿sabes tú donde está?
Mª de Fátima Correia
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